domingo, 23 de diciembre de 2007

El proyecto Crónicas de Mythica - Parte I


Voy a aprovechar que Cristian Vivar me ha entregado hace un par de días el primer avance de lo que será la portada del Tomo II, para contarles un poco más de la génesis de este proyecto.

Me gustaría empezar diciendo que el 3 de agosto de 2007 será una fecha memorable en la historia nacional de la historieta, pero voy a dejar por ahora ese sueño para los futuros recopiladores. Por lo pronto, ese fue nada más el día en que ingresé al foro de Ergocomics y comencé a soñar en todo esto.

En ese espacio se encuentra lo que yo creo es la más amplia fauna de artistas de la historieta en Chile, dibujantes, entintadores, guionistas; profesionales y aficionados. Incluso tienen visitas asiduas de otros artistas del extranjero. La actividad de la historieta en nuestro país, generalmente se da cita en ese lugar de internet.

Creo haber contado antes que soy un lector de historietas desde hace ya muchos años. Pertenezco a la generación dorada, la que tuvo la suerte de conocer la época de mayor auge nacional en lo que a publicación de historietas se refiere. Por mis manos pasaron revistas tales como Cinco por el Infinito, Far West, Agente Silencio, Patrullera 54, El Manque, Dr. Mortis, Mizomba, Jungla, Guerra, U-2, etc. Desde fuera también nos llegaba la editorial Novaro (México) con Fantomas, El Monje Loco; de argentina conocí a Patoruzú y Billiken. Por herencia me llegaron Topazes (primera época), El Peneca, Pinguinos, Viejo Verde.

Cuando desapareció la industria nacional de la historieta, seguí leyendo cosas que me obsequiaban desde afuera, como Asterix, Lucky Luke, Fierro, Zona84, Conan y todo ese enorme conjunto de revistas argentinas de lomo pegado y muchas páginas, donde conocí personajes tales como Nippur de Lagash, Gilgamesh, Mark .. en fin. La lista todavía puede extenderse mucho más si se incluye el pequeño revival que conocimos en los postreros días de la dictadura: Trauko, Bandido, Scorpio, etc.

Hoy solo permanecen el Informe Meteoro (10 números) y Caleuche como la única propuesta que se logra empinar en su edición número 20.

Leyendo entonces a los artistas, miembros y visitantes del colectivo en el foro de Ergocomics, de pronto sentí que ya era hora de dejar de pensar en el típico: "que hubiera pasado si ...". Acabo de cumplir 42 años y llevo casi 20 años dedicado a la informática, un trabajo que me ha dado de comer, pero que no logra llenar mi espíritu.

Comencé por elaborar la idea central de la novela: "Crónicas de Mythica". Intencionalmente recurrí a elementos de la mitología greco-romana, y me decidí por una trama de fantasía heróica principalmente pensando en el aspecto comercial de este proyecto. La idea era presentar un producto que no fuera totalmente ajeno al público que usualmente consume historietas, pero a la vez que contuviera elementos capaces de entusiasmar a otros que no son asiduos a ella.

Si quieren conocer más de la historia misma y del proceso que estamos llevando a cabo para concretarlo, les recomiendo la web del producto, y el foro en donde nos reunimos los autores y fanáticos para seguir expandiendo el universo de Mythica.

Por lo pronto, en este tema de apertura para el blog, quise mostrarles el primer avance de la portada, contarles que ya tenemos 30 páginas dibujadas y rotuladas, y que tengo como meta entregar a Caoz, antes de fin de año las 20 que restan, para que podamos tener el primer tomo en librerías durante febrero de 2008.

En un siguiente mensaje les contaré más sobre el proceso de creación y coordinación del equipo, y cosas tales como el mercadeo y distribución que estamos diseñando.

Nos leemos.




sábado, 17 de noviembre de 2007

Road Story: Reconociéndonos, reconciliándonos



No soy fan de Alberto Fuguet. Hasta hace poco afirmaba sin dudar que su estilo literario no calza con mis gustos ni intereses. Por otro lado, en este blog declaro mi pasión por la historieta en general.

Y entonces aparece "Road Story", la adaptación gráfica de un cuento corto de Fuguet en manos de Gonzalo Martínez. Aparece y sirve como inauguración de mis críticas sobre el género de las novelas gráficas (o narrativa dibujada, para los puristas).

¿Por donde tomar entonces esa tarea? Lo hago exponiendo mi propio proceso:

Primero, y aunque suene a perogrullada: que no te la cuenten; compra la novela. Independiente del hecho de que Fuguet sea o no de tus autores preferidos, si de verdad no quieres quedarte en palabras de buena crianza sobre la eterna agonía de la historieta nacional, si en serio deseas ver el añorado resurgimiento de éste campo artístico para los guionistas y dibujantes nacionales, compra la novela. No te detengas en inútiles discursos nihilistas, trasnochados y belicosos. Yo mismo abogaba en mensajes anteriores para esclarecer límites y definiciones sobre el género: que historieta, comic o tebeo no son lo mismo que novela gráfica, que adaptar una novela no es lo mismo que escribirla gráficamente desde el principio; que el término novela gráfica en sí suena más a inventiva comercial ... y en suma todo eso no es lo más importante. Lo importante es que (aunque me pese reconocerlo) sin Fuguet o Alfaguara detrás de esto, no podríamos estar escribiendo o leyendo sobre este acontecimiento.

Ah ... y no compres una versión pirata. El original me ha costado seis mil pesos, un valor al alcance de los bolsillos de muchos de nosotros. La diferencia con el valor de una hipotetica versión "de cuneta" no vale la pena comparado al daño que le podemos hacer a esta pequeña semilla que nos tiene a todos tan maravillados tras esta repentina floración.

Segundo, no la leas prejuiciado. Yo tuve el gratísimo placer de descubir a "otro" Fuguet de la mano del talento de Gonzalo Martínez. Como han confesado ambos, Martínez tuvo amplia libertad para eliminar cuanto texto estimó conveniente. Para aquellos que realmente leímos a Fuguet luego del boom de "Mala Onda", que nos fuímos desencantando de algunas cosas posteriores en su trabajo, el resultado es un re-descubrimiento.

Y sucede que tras la poda, nos quedamos con lo mejor de Fuguet. Gracias, Gonzalo, por devolvernos la causticidad, la ironía, la sinceridad en la introspección y el talento de Fuguet para poner en pocas líneas verdades como puños. Gracias por eliminar otras cosas que alejaron a este narrador de su público original. El mismo Alberto parece haberse dado cuenta (como lo deja ver en su introducción) que la principal gracia de su escritura es su estilo predominantemente visual. Eso puede augurar futuras colaboraciones en este nuevo formato, así como la decantación de Fuguet por el mercado audiovisual por encima del literario.

Tercero, lee este trabajo más de una vez. Con muy pocos libros me ha pasado como con este, que te entrega pequeños placeres nuevos al detenerte en episodios, en escenas o diálogos que te gusta volver a leer. No voy a hacer spoilers, pero por ejemplo, recomiendo la escena en el bar con los amigos del protagonista.

Cuarto, si deseas como yo dedicarte a hacer guiones para historieta, toma éste trabajo como un buen cuaderno de ejercicios. No es perfecto, pero tiene secuencias y secciones de una calidad sobresaliente, más aún considerando la intencional pobreza de recursos estilísticos. Al ser un trabajo en blanco, negro y grises, Gonzalo utilizó al máximo sus talentos para entregarnos una narrativa eficaz, impresionista y efectiva en gran parte de esta novela.

Quinto, aplica algo de condescendencia sobre algunos fallos gráficos que puedas notar. Se trata de una ópera prima hecha con mucho nervio y presión, lo que explica que la calidad gráfica de Gonzalo (y Demetrio Babul en los grises con casi completa eficacia) acá no sea siempre pareja a lo largo de todo el libro. Road Story es el primero de lo que espero sean muchos trabajos futuros, por lo que es injusto (y puede que hasta idiota) pedirle ahora la calidad de competidores que llevan muchos años de delantera expandiendo el género en NorteAmérica y Europa.

Nadie le pide a un pequeño que recién empieza a caminar, que rompa récord en algún velódromo.

Para terminar y resumir, ayer pasé por una librería de Santiago que tiene un hermoso display de buenas dimensiones para promover el trabajo de Alberto y Gonzalo, y una agradable sensación me recorrió el cuerpo. Estaba viendo el trabajo de un dibujante chileno, destacado a la entrada de una librería del barrio alto. Ya no era necesario poner gesto culpable ante el librero para preguntar por la sección de cómic y encontrarla (si había suerte) perdida en el fondo de las filas de anaqueles. Ese logro, que sinceramente espero se prolongue en el tiempo y marque el ansiado renacer que tantos de nosotros esperamos, vale por cualquier crítica negativa que pudiera hacerse sobre Road Story. Si se trata de decir algo malo del otro, siempre habrá quien pueda hacerlo.

Debemos ver este trabajo con altura de miras, con admiración sincera hacia sus gestores (Alfaguara, Alberto, Gonzalo y Demetrio ... ¡que cojones!) y agradecimiento profundo hacia lo que puede significar para todos nosotros, los que de verdad amamos la historieta chilena.

domingo, 11 de noviembre de 2007

Quimantú - Sol de Sabiduría que vuelve a brillar


Hoy domingo leo en La Nación una nota pequeña, que seguramente en su edición impresa ha pasado casi desapercibida. Cito textual:

"Este sábado 17 de noviembre la Editorial Quimantú realizará una comida estilo mexicano para juntar fondos y continuar su proyecto de libros al alcance de todos los bolsillos, tal como lo hacía en la década de los setenta.

La clave de Quimantú fue poner a la venta obras clásicas y contemporáneas en literatura, historia e información general a bajo costo, a través de pequeños libros. La publicación de los textos logró cambiar socialmente el panorama del libro, porque hasta antes de la Unidad Popular ello era privilegio sólo de una elite.

La reunión de los ex miembros de la editorial se realizará en el Centro Cultural Michoacán (Casa de la Hormiguita), ubicado en Lynch Norte 164, La Reina. El valor de la entrada es de $ 4.000 y da derecho a un buen plato mexicano."

Yo tenía 6 o 7 años cuando comencé a leer "El Manque", un personaje que marcó mi infancia y que me acompaña hasta ahora con mi apodo cibernético (Manquenahuel). La Editorial Quimantú se caracterizó, como dice la nota que cito, por poner al alcance del pueblo llano muchos clásicos de la literatura en formato de bolsillo y a bajo costo. Pero además nos entregó a los niños y adolescentes de entonces un puñado de héroes e historias inolvidables. Junto a El Manque, recuerdo ahora: Mizomba, el intocable; Jungla (con Mawa, reina de la selva), U-2, Cinco por el Infinito, incluso una historia protagonizada por una patrulla de carabineros, en ese entonces todavía héroes en el inconsciente colectivo, antes de que la época oscura de la dictadura los convirtiera en villanos.

Hoy que llevo algunos meses emprendiendo esta aventura de editar mi primera novela gráfica y formar con ella la simiente de una editorial, se suma esta noticia a ese revival que parece estar viviendo el fenómeno de la historieta en el país. Alfaguara lanza Road Story, la novela gráfica de Fuguet con dibujos de Gonzalo Martínez, la revista "Caleuche" que muchos suponían haciendo agua, resurge con nuevos bríos para lanzar a la calle su número 20. Este sólo año he asistido ya a cuatro lanzamientos de nuevas publicaciones, y me he perdido varios más.

Y entonces, como guinda de la torta, la editorial que preñó mis primeros sueños de aventura dibujada anuncia que vuelve a la carga. Primero serán sus libros de bolsillo, pero estoy seguro que luego le seguirá ese resurgimiento que todos los amantes de la historieta estamos esperando.

No sé si me alcance el tiempo para asistir a ese evento, pero desde aquí les envío mis mejores deseos de éxito, ya que será un éxito compartido por muchos de aquellos que formamos la generación Quimantú.

Nos leemos.

sábado, 20 de octubre de 2007

Calibre Zero - PDF y ZIP sin demora

Me contacté con el autor de esta publicación para ofrecer alojamiento gratuito a sus ediciones, con el fin de evitar el uso de sitios como RapidShare, MegaUpload y similares, que son bastante engorrosos. El servidor donde alojo la web de Mythica tiene todavía mucho espacio disponible. Por ello, ahora pueden probar la descarga del primer número de Calibre Zero en la siguiente dirección: http://www.mythica.cl/CalibreZero.html

La página no es muy vistosa, ya que su fin principal es poner al alcance de sus lectores las versiones PDF y ZIP de la publicación. Más adelante veremos de hacer algo más bonito.

Nos leemos.

lunes, 15 de octubre de 2007

Calibre Zero - Recoge el guante


Hace unos días comenté la envidia que despertó en mi la lectura de "Sonaste Maneco", revista trimestral argentina que se dedica a difundir la cultura de la historieta latinoamericana. Les había contado que llegué a esa revista desde un enlace puesto por alguien en el foro de Ergocomics.

Pues bien, resulta que ese "alguien" tiene nombre: Cristian "Huaso" Valenzuela, el mismo que se acaba de atrever a lanzar el primer número de su revista mensual autogestionada: "Calibre Zero".

Me alegra leer que alguien responde al desafío que anoté en un mensaje anterior (aunque a decir verdad, es poco probable que lo leyera).

La publicación es obviamente deudora de la ya citada "Sonaste Maneco", no sólo porque la utiliza como parte de sus fuentes, sino porque la gráfica y diseño son muy (demasiado) similares. No es mala práctica escoger un modelo e imitarlo, ya que esa es una buena forma de hacer bien las cosas. Por ello, como este es un primer número y desde este espacio quiero enviarle toda la buena onda posible para que vengan muchos más, voy a esperar a los siguientes para ver si se corrigen algunas cosas tales como:

  • urgente trabajo de revisión ortográfica y de redacción. Se nota demasiado cuando el que escribe es el autor, o cuando toma un artículo textual de otra fuente.
  • experimentar sin miedo con las herramientas de diseño, o asesorarse al respecto para corregir aspecto estéticos (muy notorios por ejemplo, en el diseño de portada)
  • mayor contenido sobre la actualidad de la historieta nacional, ya que de esa forma conseguirá el sello diferenciador y el material que le permita diferenciarse de su modelo mentor.
El último punto es el que me parece más importante, por lo que solo resta hacer un llamado a todos los creadores del medio (dibujantes, editores, guionistas) para que se contacten con el "Huaso" Valenzuela y le ayuden a mantener "Calibre Zero" como una publicación actualizada, veraz y completa sobre lo que pasa en Chile con la cultura comiquera.

Para confirmar la importancia de lo que acabo de decir, es necesario destacar que lo mejor de este número es una extensa nota (con historieta incluída) al "Capitán Chile", personaje al que le encuentro un potencial enorme. Su guionista y dibujante se desenvuelve con gran soltura en la sátira social, y sus caricaturas son de gran calidad, recordándome incluso a la antigua revista norteamericana M*A*D.

Ruego para que esta aventura de Cristian Valenzuela no sea simplemente una distracción, sino que se lo tome tan en serio como lo que la dolorosa ausencia de una propuesta como la suya significa para todos quienes amamos esto de la historieta chilena.

¡Animo, Huaso! Gracias por atreverte.

domingo, 7 de octubre de 2007

Yo trabajo haciendo historietas ...


A continuación, copio íntegro un artículo que me ha llamado poderosamente la atención, debido a que es una posición frontalmente contraria a la que defiendo en este blog, pero que al estar tan sólidamente fundamentada, me obliga a pensar que puedo estar en una senda equivocada. Me pregunto si, como señala el autor, en realidad al hablar de la Novela Gráfica estamos en realidad buscando escapar del desprestigio que tienen los términos cómic o historieta, intentando vestirnos con el lustroso traje de la novela y su prestigio.

Quizá el camino correcto sea esforzarnos por defender a la historieta como vehículo artístico y cultural, lo que en verdad se nos hace cuesta arriba cuando su propio nombre es ya un descrédito, por cuanto semánticamente historieta (como lo es opereta para la ópera) es un remedo de historia, un sucedáneo de menor significado e importancia, emparentado con la comedia liviana y el humor farsesco.

Entonces, si no le llamamos historieta, si al menos yo me resisto a dejarme ganar por el cómic y el manga, ¿como podemos uniformar en latinoamérica un concepto que nos permita ir por la vida orgullosos y decir que trabajamos en esto?

Del mismo modo en que el nombre de novela no es certificado de calidad (porque las hay magistrales y hay basura que se llama así), tampoco si nos llamamos novela gráfica garantizaremos tal cosa al lector. Eso ya es tarea de los guionistas y dibujantes, pero pienso que no deja de ser importante el encontrar ese término que nos defina y nos permita hablar con orgullo de nuestra pasión.

Como me decía un amigo hace algún tiempo, si digo que soy cineasta, que hago películas, entonces soy cool y atraigo miradas de envidia o al menos cierto respeto. En cambio, si digo que hago historietas todos se preguntan que es lo que le pasa a este cuarentón que no termina de madurar.


A continuación, el artículo


Por Jiro Suzuri

La novela gráfica -esa historieta novelesca de pretensiones artísticas- hunde sus raíces en un sinsentido: a finales de la década de los setenta, el historietista Will Eisner popularizó y socavó la noción con su multicitado Contrato con Dios, más próximo -literal y literariamente- al cuento que a la novela por su condición antológica. En la actualidad, el abuso del terminajo sigue sin corregirse: la reedición en español de Poema en viñetas, del escritor italiano Guido Buzzati, ostenta el oportunista e inédito subtítulo de Novela gráfica, oxímoron atribuible a la intromisión de los sabios de la publicidad. Poesía narrativa -descripción mucho más justa- habría evitado parir esa chocante y esquizofrénica quimera que no obstante graznar en verso prefiere la llamen novela, si bien su envergadura no alcanza para tanto.

Si la extensión es uno de los parámetros más fidedignos para distinguir un cuento de una novela, es de suponer que una novela gráfica habría de compartir tal distinción. No obstante, ¿cómo establecer una equivalencia entre la narrativa encerrada en viñetas y aquélla que no lo está? El problema no es sencillo, y mucho menos si, como repite el lugar común, una imagen vale más que mil palabras: un par de páginas dibujadas con maestría bien podrían multiplicarse hasta alcanzar decenas repletas de texto, en un esfuerzo por capturar en palabras lo que la historieta dispone en imágenes. Y aun de ser esto posible, ¿cómo capturar fielmente el espectro de tonalidades, el peso de una línea o la expresividad emanada de la composición? ¿Cómo hacer para no extirpar la ambigüedad hipnótica de una imagen cuando ésta se explica? Por otro lado, la capacidad del lenguaje escrito para decir mucho en poco espacio refuerza el sinsentido de tal equivalencia: ¿cuántas viñetas se necesitan para traducir al lenguaje del cómic, sin menoscabo, Crimen y castigo, Cien años de soledad o Ulises? Un relato breve bien podría ocupar cientos de páginas de historieta, sin por ello abandonar su naturaleza de cuento para mudar en novela gráfica.

Aunque son muchas las adaptaciones historietiles de obras de la tradición novelística -casi siempre abreviadas en flacos cuadernillos-, no por esto se le insufla al cómic la quintaesencia de la novela. Más aún, ¿vale la pena dejar de lado el poder de la prosa desnuda para despertar la imaginación e involucrar al lector en aras de un espurio ennoblecimiento? Algo hay de necedad en pretender amoldar un lenguaje a la horma de otro, en imponer superficiales paralelismos semánticos.

Por más que se niegue, quien prefiere el título de novela gráfica por sobre los más humildes de cómic o historieta pretende embarrarse del prestigio concedido a la novela, y del cual no siempre gozó. Las palabras no son grilletes, y así como la novela trascendió su sentido original de novedad hija de la moda, ajena a la literatura, así la historieta debiera superar los prejuicios en su contra a través de obras y no recurriendo a términos rezumantes de vanidad. Se olvida asimismo que la calidad literaria del género es dispareja: lo mismo es novelista León Tolstoi que Carlos Cuauhtémoc Sánchez.

Si lo que se busca es una dignidad negada, ¿en qué sentido la devuelve un término secuestrado de artes reconocidas como tales? El definirse a sí misma en términos de la literatura y de las artes visuales le niega tácitamente identidad y valor a la novela gráfica, cuyo mérito radica entonces en su semejanza con la novela y su parentesco con el arte colgado en museos y galerías.

A nivel sintáctico, el término supone la primacía de lo verbal por sobre lo visual, en franca oposición a la creencia -tantas veces escuchada de labios de los quijotes de la novela gráfica- de que la imagen es consustancial a la palabra en la historieta. En tanto que novela es el sustantivo determinante de la esencia del objeto, gráfica, en su calidad de adjetivo, tan sólo acompaña y matiza aquello que se es. ¿Cómo argumentar así en favor de la paridad entre ambos componentes? Para evitar este tipo de sinsentidos jerárquicos, mejor inspirarse en el arte cinematográfico y pergeñar palabritas como estatografía, dueña de ese tufillo cientificista tan apreciado por rimbombante.

Fuente: El Financiero / México
Viernes, 28 de septiembre de 2007

sábado, 6 de octubre de 2007

Sonaste Maneco - Comic Cultura


Navegando en el foro de ergocomics, me encuentro el mensaje de un usuario que anuncia la publicación del número 12 de la revista "Sonaste Maneco". No me pregunten por qué se llama así, ya que quienes tienen la respuesta son los amigos del colectivo "La Bañadera del Comic", sus autores.

La publicación es gratuita, descargable en PDF y de una calidad de contenidos realmente asombrosa. La recomiendo sinceramente. Los amigos de La Bañadera demuestran número a número lo que se puede hacer cuando se reúnen personas que aman lo que hacen y que manejan una cultura comiquera profunda e importante.

Como chileno, siento sana envidia cuando leo material de difusión de ese estilo y calidad, ya que por estas tierras vivimos llorando la muerte del comic nacional, añorando su resurgimiento y recordando épocas de oro que son compartidas en un círculo compuesto siempre por las mismas caras.

Hace falta algo como "Sonaste Maneco" por estos lados, hace mucha falta. En esta publicación se demuestra a la historieta como vehículo de difusión cultural de primera línea, material que incluso se utiliza en docencia, al otro lado de Los Andes. ¿Alguien conoce algo así en Chile?

Personalmente conozco grandes figuras de la historieta nacional, fuentes imperdibles de acervo cultural sobre la historieta chilena, que se pierden en un silencio abrumador porque no somos capaces de devolverles el sitial que se merecen y difundir la calidad de su obra. Por ejemplo, en el último número de ésta revista electrónica, aparece consultado nuestro compatriota " Hernán ("Hervi") Vidal, en elogiosos términos ... ¿Y en Chile? ¿Quienes, fuera de los que somos iniciados en este mundo, pueden decir algo sobre su obra?

¿Qué estamos haciendo en nuestro país para que las generaciones actuales y futuras sepan de que hablamos cuando mencionamos a gente como "Themo" Lobos, Mario Igor, Max Carvajal, Lukas, Coré, Lugoze, Oskar Vega, Santiago Peñaillillo y tantos otros?


Road Story - Aberto Fuguet y Gonzalo Martínez


El próximo 31 de octubre, en el marco de la Feria del Libro de Santiago, se efectuará el lanzamiento de "Road Story", la adaptación gráfica de un cuento de Alberto Fuguet, que formaba parte originalmente del libro Cortos (2004). El trabajo gráfico está en manos del artista nacional Gonzalo Martínez.

La prensa nacional comienza a hacerse eco de un movimiento que en el mundo tiene representantes tales como Paul Auster (La Ciudad de Cristal) o Marcel Proust (En Busca del Tiempo Perdido), señalando livianamente a la obra de Fuguet y Martínez como el debut del género en Chile. Livianamente porque se obvian ejemplos como Lebeus Rahn de Martín Cáceres (próximamente editaré aquí una reseña sobre ese trabajo), o como ya he indicado en este foro, de las compilaciones de historietas de Mampato y Ogú, que si reúnen las características para ser considerados trabajos precursores del género en Chile.

Pero, como le indiqué a Gonzalo en el foro de ergocomics, lo importante ahora es que él esté reabriendo un camino para el resurgimiento del arte de la historieta en Chile, ahora de la mano de la novela gráfica, o de la adaptación gráfica de cuentos y novelas.


La juventud vive hoy en una generación eminentemente visual, por lo que la lectura de los grandes clásicos o de cualquier obra literaria, les resulta un trabajo arduo y del que muchos se sienten lejanos. Un camino es buscar las razones de ello y remediarlas, y el otro es el presentar esos mismos textos adaptados a historia gráfica. Por eso es que debe apoyarse la expansión de éste genero artístico-literario.

Por eso es que personalmente como editor, hago un llamado a formar equipos de escritor-guionista-dibujante para generar cada vez un número mayor de propuestas en el género. Y al mercado, a las casas editoriales y al público lector, el llamado es para que cada uno desde su espacio brinde su apoyo a este tipo de proyectos: las editoras arriesgándose a publicar, y los lectores arriesgándose a comprar y llevar a casa estas obras.





sábado, 29 de septiembre de 2007

¡Grande, Maestro!


El jueves pasado, por fin pude conocer en persona al autor de tan magníficos personajes e historias que poblaron mi infancia y adolescencia temprana. "Themo Lobos" es hoy un anciano pequeñito, casi calvo, con grandes anteojos para corregir miopía y estrabismo. Sin embargo, su lucidez actual es envidiable, la energía que emana de todo ese pequeño cuerpecito cuando habla de su pasión (la historieta) realmente conmueve. Al saber de mi apellido, recordó de inmediato una viñeta que el mismo había dibujado hace 30 años, (Mampato y Ogú viajan a la Primera Guerra Mundial) en donde se leía "rauchen verbötten". Mi apellido significa humo, y usado como forma verbal significa fumar; el cartel decía "prohibido fumar".

Le mostré las primeras páginas de la novela gráfica y alabó mucho al dibujante (CAOZ), enviándole cariñosos saludos y mucho ánimo para perseguir sus sueños. Y al saber que yo era el guionista, me felicitó y confirmó lo que vengo diciendo hace mucho; ya que "Themo" también es de la idea de que en Chile hace muchísima falta un semillero donde formar guionistas de historieta.

Había bastante gente joven, incluso padres y madres llevando a sus hijos para mantener con vida a la nueva generación de lectores. Y por supuesto, dibujantes que le mostraban al Maestro sus trabajos. Era emocionante escuchar de "Themo" siempre palabras de aliento, no tan sólo de buena crianza, sino observaciones agudas y útiles para los noveles artistas.

En mi caso, conversamos mucho sobre la paternidad que tiene la historieta sobre el cine, de como mucha de la disciplina cinematográfica es deudora de este nuestro arte. Recibí algunas indicaciones sobre el trabajo de guión, sobre el por qué disponer o mostrar tal o cual escena y omitir otras, en fin ... palabras que atesoro con mucho cariño, con mucha emoción.

Hace 30 años Themo era un dibujante a su máxima potencia, y yo un niño que aprendía muchas cosas leyendo su Mampato, soñando algún día dibujar como él. La vida me llevó por otros derroteros, hoy ya no dibujo pero sigo amando la historieta. Mythica Ediciones cuenta con un magnífico equipo de diseñadores y dibujantes que están llevando a la realidad mis fantasías, permitiéndome cumplir así, mi sueño infantil. Y el Maestro sigue aquí, sembrando su semilla en nuevas generaciones, con la ayuda de todos nosotros que difundimos y protegemos su legado.

Quiera Dios que a sus ochenta y tantos todavía le quede hilo en la carretilla para poner éste verano en sus manos el primer libro de las Crónicas de Mythica. Será para mí (y creo que para el resto de los que formamos el equipo) un orgullo y una felicidad enorme el presentar ante Themo Lobos una obra gráfica que está tan en deuda con él.

Nos leemos.

sábado, 15 de septiembre de 2007

Homenaje a Themo Lobos


Si existe un chileno a quien le debo mi amor por la historieta es a Themístocles ("Themo") Lobos. Por eso, agradezco a internet y a "San Google" el haberme enterado a tiempo de este homenaje y poder asistir.

Espero que la sala del homenaje se encuentre repleta de cuarentones nostálgicos y emocionados, que ojalá lleven a sus hijos para renovar la alicaída estirpe de los devoradores de historietas.

Si queda algun chileno cuarentón que lea historietas y que no conozca al Themo, en éste enlace hay un par de extensas entrevistas.

Y particularmente, recomiendo ésta entrevista.

La página oficial de Mampato, su personaje más famoso, está en aquí.



¿Mampato como novela gráfica?

Indudablemente. Si ahora existe un Harry Potter, sepan todos los niños y adolescentes que nuestro querido Mampato fue y es el precursor de las novelas gráficas de aventura.

Claro, por la periodicidad de la publicación homónima que acogía las andanzas de este muchacho de cabello naranja, y el espacio limitado de que disponía para ellas, en aquel entonces la historieta no se consideraba más que un seriado de aventuras. Sin embargo, las recopilaciones unitarias que ha realizado Themo, nos proporcionan varias novelas gráficas de calidad.

En cualquiera de las historias de Mampato, tomadas ahora como unitario autoconclusivo, encontramos todos los parámetros que nos permiten identificar una Novela Gráfica, en este caso, orientada al público infantil y adolescente.

¡Grande, Maestro!

domingo, 9 de septiembre de 2007

Primer Premio Internacional de Novela Gràfica (nota de prensa)


1. Postulantes

Podrán optar al Premio todos los autores que lo deseen, de cualquier nacionalidad o procedencia, siempre que las obras que presenten se ajusten al concepto comúnmente aceptado de novela gráfica y cumplan los siguientes requisitos:

* Estén escritas en idioma español
* Sean originales y rigurosamente inéditas
* No correspondan a autores fallecidos con anterioridad al anuncio de esta convocatoria.
* No hayan sido premiadas anteriormente en ningún otro concurso, o estén pendientes de fallo en cualquier otro certamen en la fecha en que finalice el plazo de presentación.

2. Obra

La modalidad a presentar a concurso es el cómic, en su formato novela gráfica. Cada autor debe enviar una propuesta de libro con un mínimo de 16 páginas acabadas, cuya extensión final, para quien resulte ganador, será de 96 páginas en adelante. Podrá ser presentado en blanco y negro o color, adjuntando un dossier en el que contenga las 16 páginas acabadas, con su correspondiente título, en copias impresas en formato DIN-A4., más una sinopsis detallada (de 2 folios como mínimo) con el contenido de la historia completa.

Dichas copias (no se admitirá obra original, solo las copias), irán acompañadas de los datos del autor o autores: Nombre, apellidos, dirección, teléfono, correo electrónico y fotocopia del DNI, pasaporte o cualquier otro documento de identificación.

3. Envíos

Los originales se enviarán o entregarán, indicando en el sobre "I Premio Internacional de Novela Gráfica Fnac-Sins Entido, en la siguiente dirección postal: Editorial Sins Entido / calle Válgame Dios, nº 6 / 28004 Madrid

4. Plazos

El plazo de admisión de propuestas quedará cerrado el 30 de Noviembre de 2007. El Jurado se reunirá y emitirá el fallo que se comunicará en Enero de 2008. El autor que resulte ganador se comprometerá a entregar el proyecto terminado en la última semana de Junio de 2008. La publicación de la obra ganadora será en el mes de Octubre de 2008.

Las copias no premiadas quedarán en la editorial para que sus propietarios las retiren con un máximo de tiempo de dos meses desde la publicación del fallo, bien personalmente o previo envío de mensajería, a su costa. Pasado ese tiempo quedarán en propiedad de la editorial la cual se reserva el derecho de destruirlos.

5. Composición del Jurado

El Jurado estará integrado por profesionales de la cultura, nombrado a tal efecto por las entidades promotoras, las cuales se reservan la posibilidad de que un comité lector seleccione entre los originales presentados cuantos finalistas estime oportunos.

6. Premio y fallo del Jurado

Se entregará un premio único e indivisible de 8.000 euros (que se abonará en dos etapas: el 50% del importe con la comunicación del fallo, y el 50% restante en el momento de su publicación).

La obra ganadora será publicada por Ediciones Sins Entido, que será responsable de la producción y edición y el ganador firmará contrato con esta editorial. Al mismo tiempo los originales de la obra ganadora se expondrán en la Fnac, en su circuito de galerías fotográficas de España. El importe del premio estará sujeto a la legislación que en materia de retenciones señale la normativa fiscal.

El fallo del Jurado será inapelable, no podrá ser declarado desierto y se otorgará a aquella obra de las presentadas que por unanimidad o, en su defecto, por mayoría de votos del Jurado, se considere merecedora de ser galardonada.

7. Distribución y Presentación pública

La obra premiada será distribuida por Sins Entido, y Fnac garantizará la especial implantación y comunicación de la obra ganadora en todos sus espacios comerciales. La presentación pública del premio se realizará en uno de los Forum de Fnac que la organización estime más oportuno.

El hecho de tomar parte en el concurso implica la aceptación de las bases.

Fuentes: ClubCultura - SinSentido


¿Se puede hablar de Novelas Gráficas?

Para comenzar, es necesario definir la postura del autor de este blog, con el fin de que los detractores y favorecedores tengan bien delimitada la cancha del debate.

Del mismo modo como un cuento no es una novela, pese a ser ambos ejemplos del universo narrativo, tampoco un comic, tebeo o historieta se puede llamar novela gráfica.

Existen varios criterios que nos permiten distinguir ésta forma de contar historias:

  • Extensión. Una novela gráfica, igual que en el caso de las novelas tradicionales, es más extensa que una historieta, pues presenta un número mayor de personajes e hilos argumentales paralelos.
  • Autoconclusión. Una novela gráfica no cierra jamás su última página con el tradicional "continuará ..." de las historietas. Puede darse el caso de que la extensión y complejidad de la trama y sus substramas obliguen a separar la historia en libros, pero cada uno de ellos cierra claramente y puede tratarse en forma independiente del resto.
  • Calidad gráfica y narrativa. Este puede ser el punto más controversial, pero tiene fundamento en la forma como opera el mercado editorial en su gran mayoría. La historia que se cuenta en un cómic es de rápido desarrollo y desenlace, sin demasiados vericuetos que confundan al léctor. El dibujo, por lo general, se basa en el oficio de sus autores, pero no pretende descollar o explorar nuevas vertientes expresivas. Las fechas de entrega presionan tanto al guionista como al ilustrador. Una novela gráfica desde sus orígenes se plantea con un calendario más holgado y metas artísticas más altas, ya que se pretende entregar un producto definitivo y que merced a futuras reediciones pueda trascender o permanecer, tal como lo hace una novela tradicional.
Por otro lado, tampoco se puede confundir una novela gráfica con la adaptación gráfica de una novela. Puede parecer juego de palabras, pero también es sustentable esta afirmación. En una novela gráfica, el guionista y los artistas involucrados (letrista, lapiz, entintador y colorista) saben que están enfrentando una narración que ha sido específicamente concebida para el medio en el que ellos se desenvuelven, por lo que muchos de los problemas que encuentra el guionista que pretende adaptar una novela tradicional a su equivalente gráfico, aquí no existen.

El párrafo anterior no pretende menospreciar el trabajo de quienes adaptan una novela tradicional al medio gráfico, sino todo lo contrario. Se requiere un excelente trabajo de guión, y un profundo conocimiento literario, para que el resultado de ese trabajo sea de la calidad que merece tanto la obra adaptada como el resultado gráfico final.

Como editor de novelas gráficas que pretendo llegar a ser, es de primordial interés para mi el situar el producto en el nivel que merece. Confío en que todos los que pretenden ganarse la vida haciendo algo que aman (escribir o dibujar), estarán de acuerdo en esto.

Hace cuarenta años Chile tuvo la oportunidad de hacer de la historieta un universo valioso y valorado, fuente de trabajo y realización de grandes profesionales. Luego vino la época negra de la dictadura y actualmente nos debatimos entre el reinado imperialista del comic y el uniforme con el que pretende vestirnos el manga.

Siento que ya es tiempo de hacer algo para cambiar el estado de las cosas. Y como prueba de que no estoy reaccionando en contra de todo el comic o todo el manga, les dejo una frase inspiradora que proviene de uno de los padres fundadores del comic americano

"Un gran poder conlleva siempre una gran responsabilidad".

Y yo parafraseo: "Si queremos el poder, asumamos ahora nuestra responsabilidad".

Nos leemos.